Meredith Monk es un ejemplo de dedicación interdisciplinar al arte en general: compositora, intérprete, directora, vocalista, directora de películas y coreógrafa. Ha estado relacionada con los entornos de la música contemporánea y otros, como el minimalista, siendo fichada para ECM por Manfred Eicher en 1981. También ha hecho música para películas de los hermanos Coen o de Godard. Está en todos “los fregados” y siempre experimentando con el sonido de la voz y sus posibilidades expresivas.
El personaje de Conlon Nancarrow es tan extravagante que parece inventado. Os prometo que es real, lo podéis ver en la Wikipedia. No obstante, para saber sobre su vida es mejor consultarlo en inglés, porque trae más información.
Además, tengo que reconocer que a veces me invento alguna cosa pero siempre es en el blog de “todas las cosas”. En éste de “todas las músicas” procuro poner sólo verdades como puños.
Últimamente publico poco en este blog. No es porque tenga dejada la música, al contrario, lo que pasa es que llevo una temporada enfrascado en la lectura de la monografía de Ulrich Dibelius sobre “La música contemporánea a partir de 1945”. Lectura que voy alternando con la documentación y escucha de autores que no había oído o de los que había oído poco.
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En esta tarea de cuando en cuando se encuentra uno con compositores curiosos como CONLON NANCARROW. El caso de este compositor de Texarkana (Arkansas) es doblemente interesante, en primer lugar por su biografía y en segundo lugar por las consecuencias que ésta tuvo en su vida.
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Músico de jazz en sus inicios, decidió estudiar música en Cincinnati primero y en Boston después, donde fue alumno de maestros como Walter Piston, famoso en estos lares por su tratado sobre armonía, (edit. Labor). En Boston conoció a Arnold Schoenberg, que venía huyendo de los nazis y buscaba refugio en el Nuevo Mundo. Por aquel entonces Conlon Nancarrow se afilió al partido comunista. Eran tiempos en los que había que tomar partido por un bando o por el otro, (a menudo de forma radical), y muchos famosos músicos americanos lo hicieron por las ideas de izquierda, incluso asumiendo la ideología marxista. Nancarrow, como muchos otros, había visto en las carnes de Schoenberg y otros músicos europeos las consecuencias que podía traer el triunfo del fascismo en toda Europa y cuando conoció el golpe de estado de los militares contra la República Española decidió embarcarse y venir con la Brigada Lincoln a incorporarse a las Brigadas Internacionales que luchaban para detener el avance inminente del fascismo y a defender nuestra República. Estos brigadistas no hicieron más que poner freno al fascismo anticipándose a lo que al final tendría que hacer su país: unirse a los aliados para acabar con las agresiones del Eje. Sin embargo, en 1939 cuando volvió a EE.UU. después de abandonar España, vio como los “brigadistas” eran molestados por su Gobierno que les negaba el pasaporte y les sometía a continuos interrogatorios por su alistamiento con los comunistas. Debido a esta presión, decidió finalmente exiliarse en México. En el año 1981, con motivo de la vuelta a su país para el Festival Americano de la Nueva Música en San Francisco, solicita información sobre las condiciones para su regreso, ya que la ciudad de México, donde vive, soporta una contaminación elevadísima que le perjudica su enfisema pulmonar. Su gobierno le contesta diciendo que tiene que firmar una declaración en la que reconozca que su actuación se debió a que era joven e insensato, (young and foolish). Como quiera que se negara a firmar tal declaración, acabó sus días en Las Águilas (México D.F.), muriendo en 1997 a la edad de 84 años.
En México vivió bastante aislado del mundo musical con apenas unos pocos amigos músicos y sin contacto con la infraestructura necesaria para poder estrenar sus obras y encontrar músicos capaces de interpretarla.
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Hasta aquí su biografía, ahora veamos como influyeron todos estos acontecimientos en su música. Debido al aislamiento que encontró en México y a la falta de músicos y organizaciones capaces de estrenar sus composiciones, Nancarrow se vio en la imposibilidad de que su obra fuera escuchada. En el libro de Henry Cowell “New Musical Resources”, encontró la solución a su problema. Sugería Cowell la utilización de medios automáticos de la época, como la pianola o piano mecánico, capaces de reproducir ritmos complicados de difícil ejecución por la mano humana. Se compró un piano reproductor mecánico (piano roll), con el que realizó sus primeras obras que tenían mucho de los motivos del jazz primitivo de Art Tatum complicado con sofisticados esquemas métricos. Conoció también los pianos preparados de John Cage e hizo algún intento de hacer música con ellos, si bien se vio frenado por problemas prácticos a la hora de preparar los pianos.
En cualquier caso, su música para pianola le llevó a componer complicados cánones en los que la relación del tempo entre las partes podía ser del tipo de e:pi, en lugar de los habituales 2:1 o similares. También podía hacer sonar con este sistema rapidísimas series de semifusas a velocidades imposibles de ejecutar por la mano del hombre. Para Gyorgy Ligeti su música era: el mayor descubrimiento habido desde Webern y Ives… algo grande e importante para toda la Historia de la música. Su música es tan extrañamente original, tan lúdica, perfectamente construida, pero al mismo tiempo tan emocional… para mí es el mejor de los compositores vivos”.
Este es un documento que ofrece una presentación de Nancarrow por el músico mexicano Julio Estrada y una de sus piezas para pianola.
En su monografía sobre “la música contemporánea a partir de 1945”, Ulrich Dibelius, parte de la situación existente en Alemania y el mundo el día de la liberación, es decir, al finalizar la cruenta II Guerra Mundial, para señalar a continuación los orígenes culturales que se habían dado durante la primera mitad del Siglo XX y, después de desgranar los maestros y mediadores entre la generación anterior a la guerra y los primeros años de la posguerra y la joven generación que entonces surge, principalmente en Europa, hace mención a los centros en los que se desarrolló la nueva música en el periodo comprendido entre 1945 y 1965 y destaca entre éstos:
- Los cursos internacionales de verano de Darmstadt
- Las jornadas musicales de Donaueschingen.
- La Sociedad Internacional de Música Contemporánea.
- Los estudios de música electrónica de Colonia y Munich.
- Los conciertos del “Domaine Musical” de París.
- El conjunto instrumental “Die Reihe” de Viena.
- El estudio experimental Gravesano, cerca de Lugano, donde Hermann Scherchen instaló tres talleres electrónicos en su propia casa y propició encuentros de nueva música.
Con cierta pretensión exhaustiva y una clara estructura en su discurso, tras relacionar los distintos grupos de nueva música que se formaron en los países de Europa y en el resto del mundo, pasa a establecer los términos utilizados en la definición de esta música que más éxito tuvieron en su momento. La propia enumeración de estos términos nos da una idea aproximada de los problemas que inquietaban a los compositores del periodo.
Estos términos, que va desarrollando uno a uno son los siguientes:
- Acontecimiento sonoro, (Klangereignis)
- Aleatoriedad.
- Atonalidad.
- Cluster.
- Composición fonética, (Spachtkomposition).
- Espectro.
- Estadístico.
- Estructura.
- Formante.
- Melodía de timbres, (Klangfarbenmelodie).
- Música serial.
- Notación
- Notación gráfica.
- Nueva Música.
- El ordenador.
- Organización temporal.
- Parámetros.
- Prohibición de la periodicidad.
- Permeabilidad.
- Ruido.
- Serie.
- Teoría de la información (de la comunicación).
- Tono sinusoidal.
Posteriormente, la monografía sería continuada en ediciones posteriores con la referencia a los años que van de 1965 a 1985. Pero esa es ya otra historia.
Hemos hablado de Renee Rosnes con motivo del próximo festival de Estoril. Se trata de una pianista que ha acompañado a J.J. Johnson y al recien desaparecido Freddie Hubbard, entre otros. Está casada con el batería Billy Drummond.
El tema que ponemos aquí da idea de la categoría musical de esta mujer.
Pianista y compositora canadiense, Renee Rosnes ha tenido un magnífica carrera que le ha supuesto un significativo reconocimiento internacional. Inició sus estudios de piano clásico a la edad de tres años y se interesó por el jazz durante sus estudios de secundaria. Coincidiendo con su traslado desde Vancouver a Nueva York en 1986, estableció una rápida reputación motivada por su formidable talento. A finales de 1986 se unió al cuarteto del saxofonista Joe Henderson. En 1988, pasó un año en el quinteto de Wayne Shorter, y en 1989, el legendario trombonista JJ Johnson la invitó para incorporarse a su grupo como su pianista. Ms. Rosnes ha tocado también con el la Carnegie Hall Jazz Band con Jon Faddis, la Dizzy Gillespie All-Star Tribute Band, la orquesta de Gerald Wilson y la Big Band de la radio danesa. Habiendo realizado giras y grabaciones con muchos de los mayores maestros, su presencia es parte de la historia del jazz.
Desde 1990 Ms. Rosnes ha realizado una serie de nueve discos en el sello Bue Note que han sido muy alabados por la crítica, habiendo ganado los premios Juno y varios premios del Canadian National Jazz Awards. Además de dirigir sus propios grupos Ms Rosnes es también miembro del cuarteto de James Moody, toca a menudo con el vibrafonista Bobby Hutcherson, y es miembro fundador del San Francisco Jazz Collective: un octeto formado por estrellas que ha contado con artistas como Joshua Redman, Nicholas Payton y Joe Lovano.
A uno le gusta tanto Miles Davis que no entiende como los jóvenes de ahora, en lugar de fijarse en ese pasado endeble que pretende ser exquisito y se queda en un jazz mórbido y fláccido, no escuchan más el Bitches Brew o el Sorcerer.
Entre los discos que nos recomendó emiles me está sorprendiendo, (en sucesivas audiciones), el de Raynald Colom. Este trompetista catalán y francés que estudió en el Berklee College con Wynton Marsallis hace una lectura de la tradición mucho más interesante que aquella a la que nos tiene acostumbrados su maestro.
Por otra parte su forma de fusionar el flamenco y el jazz es muy auténtica. Deja a cada músico que haga lo que sabe y todo encaja a la perfección. La versión de Sanctuary del Bitches Brew, con una instrumentación más sencilla que el original, está muy bien conseguida y el martinete final lo hubiera firmado el mismísimo Miles.
