Las sonatas para piano de Beethoven, por Charles Rosen, es un libro que realiza un análisis de las sonatas más conocidas de la historia de la música.
Hay que decir que es un libro de un intérprete y está enfocado a los pianistas que se internan en el estudio a fondo de estas piezas fundamentales del repertorio pianístico. No obstante, para quien no lo sea el libro tiene interés en dos aspectos. En primer lugar, el estudio de la interpretación bien entendida pasa por el análisis de la obra y así lo hace Charles Rosen, de modo que su lectura nos sirve para ayudarnos en el estudio de la composición, (incluyendo análisis formales, armónicos, etc.), bastante completos. En segundo lugar es una forma interesante de conocer cómo se debe de encarar la interpretación de un repertorio y cuáles son los factores a tener en cuenta. Además de las indicaciones que aparecen explícitas en la partitura, Rosen nos ilustra de cómo el intérprete debe de conocer “el funcionamiento” interno de la composición, en Beethoven especialmente la forma y la armonía, pero sin olvidarse del estudio de los temas y su interrelación compleja en la forma sonata. Es, por tanto un buen ejemplo de musicología de la interpretación.
Hay que decir que es un libro de un intérprete y está enfocado a los pianistas que se internan en el estudio a fondo de estas piezas fundamentales del repertorio pianístico. No obstante, para quien no lo sea el libro tiene interés en dos aspectos. En primer lugar, el estudio de la interpretación bien entendida pasa por el análisis de la obra y así lo hace Charles Rosen, de modo que su lectura nos sirve para ayudarnos en el estudio de la composición, (incluyendo análisis formales, armónicos, etc.), bastante completos. En segundo lugar es una forma interesante de conocer cómo se debe de encarar la interpretación de un repertorio y cuáles son los factores a tener en cuenta. Además de las indicaciones que aparecen explícitas en la partitura, Rosen nos ilustra de cómo el intérprete debe de conocer “el funcionamiento” interno de la composición, en Beethoven especialmente la forma y la armonía, pero sin olvidarse del estudio de los temas y su interrelación compleja en la forma sonata. Es, por tanto un buen ejemplo de musicología de la interpretación.
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